
Autora: Toko Kawai
Duración: Tomo Único
Editorial: Libre
Año: 2008
Tengo la manía, y supongo que no soy la única, de guiarme por la portada a la hora de decidir leerme un manga. Ya se dice que no es bueno juzgar por la portada, porque muchas veces te puede llevar a engaño, pero no lo puedo evitar, y me enamoré de esta portada en cuanto la ví. En este caso, las apariencias no engañan; la portada refleja exactamante el tipo de historia que nos ha brindado Toko Kawai.
Serizawa y Keito se conocen en la librería en la que trabaja el primero. Serizawa tiene la mala costumbre de liarse con hombres que no le convienen, y Keito, con su desmesurada altura y su mirada desafiante, tiende a causar mala impresión en la gente que tiene alrededor y a asustarles. La primera reacción de Serizawa es precisamente asustarse, pero enseguida se da cuenta de que Keito no es ni mucho menos como aparenta; es el chico más tímido, amable y dulce que ha conocido en toda su vida.
Los dos chicos congenian, y todo parece indicar que van a vivir un bonito romance, pero, ¿cuándo todo es demasiado perfecto, no tiene que fallar algo...?
Café Latte Rhapsody es el manga más sencillo que he leído en mucho tiempo. Durante los cinco capítulos que dura, Toko Kawai nos presenta una historia de amor sin complicaciones: chico conoce a chico, chicos se enamoran, chicos superan su primera pelea, chicos son felices y comen perdices.
Serizawa y Keito se conocen en la librería en la que trabaja el primero. Serizawa tiene la mala costumbre de liarse con hombres que no le convienen, y Keito, con su desmesurada altura y su mirada desafiante, tiende a causar mala impresión en la gente que tiene alrededor y a asustarles. La primera reacción de Serizawa es precisamente asustarse, pero enseguida se da cuenta de que Keito no es ni mucho menos como aparenta; es el chico más tímido, amable y dulce que ha conocido en toda su vida.
Los dos chicos congenian, y todo parece indicar que van a vivir un bonito romance, pero, ¿cuándo todo es demasiado perfecto, no tiene que fallar algo...?
Café Latte Rhapsody es el manga más sencillo que he leído en mucho tiempo. Durante los cinco capítulos que dura, Toko Kawai nos presenta una historia de amor sin complicaciones: chico conoce a chico, chicos se enamoran, chicos superan su primera pelea, chicos son felices y comen perdices.

Y es que si a uno le gustan las historias dulces, es muy fácil enamorarse de este manga y de sus dos protagonistas, que seguramente son una de las parejas más adorables de los últimos tiempos, dos personajes amables y muy buenas personas, pero terriblemente inseguros, cada uno a su manera, que lo único que quieren es tener a alguien que les quiera y les cuide, y les mire sólo a ellos, y es algo que tendrán que aprender a hacer una vez estén juntos, sobre todo en el caso de Serizawa, que aún siendo el más sociable de los dos, en realidad es el que más miedo tiene a estar solo.
En definitiva, un manga precioso, ideal para esos momentos en los que apetece una buena dosis de romanticismo azucarado.
